Info sobre Peces- Enfermedad: Ictioftiriosis o Punto Blanco


La Ictioftiriosis, Ich, o enfermedad del punto blanco es provocada por un protozoo ciliado de la familia de los Ichthyophthirius (de así su nombre), generalmente de la variedad Multifiliis. Se trata de un parásito que generalmente es bien tolerado por los peces, tanto es así que en muchas ocasiones peces sanos son portadores de estos protozoos que se mantienen en estado letargo. Cuando se produce un desequilibrio en el acuario el Ich reactiva su ciclo vital, apareciendo así como una enfermedad oportunista que puede afectar a todas las especies de agua dulce sin excepción.

El Ich tiene una forma oval o periforme, cubierto por una capa de quitina flexible pero resistente. Se desplaza por el agua gracias a una pequeñas extensiones (cilios) que rodean su cuerpo.

Su ciclo vital puede resumirse en cuatro fases:

1. Fase de ternote: es la forma libre en la que el individuo se desplaza por el medio acuoso en busca de un huésped a quién infectar.

2. Fase de trofonte: Gracias a los cilios que lo rodean, y una vez encontrado un huésped, se fija a éste, quien a su vez se defiende creando una capa protectoraal rededor del parásito y generando así un quiste en la zona afectada. Estos quistes son los puntos blanco que se aprecian a simple vista.

3. Fase de tomonte: el parásito alcanza el tamaño adecuado para su reproducción, por lo que se libera de su huésped y se enquista en el sustrato u otras partes del medio.

4. Fase de reproducción: a través de la llamada fisión binaria se generan nuevos tomitos que son liberados de nuevo al medio para comenzar de nuevo el ciclo.

Esta enfermedad presenta una sintomatología muy clara. El individuo afectado comienza a sentir un malestar general y picores debido a los parásitos, por lo que es frecuente que se rasque contra el sustrato o la decoración del acuario en busca de alivio, natación impulsiva o incluso una posterior pérdida de movilidad. También se observa, a medida que la enfermedad avanza, la aparición de quistes ovalados de contorno regular formando los conocidos puntos blancos que dan el nombre por el que comúnmente se conoce esta enfermedad. Estos parásitos pueden afectar tanto a las aletas, como la piel o las agallas. Si afecta a estas últimas puede observarse también un ritmo respiratorio anormal y, en casos avanzados, serios problemas respiratorios. es frecuente también la aparición conjunta de infecciones bacterianas en mayor o menor medida. También puede observarse, aunque de manera menos frecuente, otros síntomas tales como necrosis, lesiones abrasivas, pequeñas hemorrágias o exoftalmia.

Hay distintas formas de tratar esta enfermedad. Primeramente cabe destacar la importancia de la temperatura para afrontar rápida y eficazmente esta afección. Es conveniente un progresivo aumento hasta superar los 30ºC. Es importante tener presente que aumentando la temperatura se aumenta también el ciclo vital del Ich, disminuyendo así por una parte el tiempo que el afectado está expuesto al parásito, pero también aumentando el tiempo de la fase de ternote o parásito en forma libre, única fase durante la cual es vulnerable a los medicamentos. Los cambios parciales de agua ayudan tambiñen en gran medida ya que así se reduce notablemente el número de parásito en forma libre que buscar huéspedes de los que beneficiarse. En los casos tempranamente detectados estas simples consideraciones, así como una reducción al máximo de lo posible de las horas de luz, suele bastar para terminar con la infección parasitaria en pocos días.

Por otra parte, en casos en los que se encuentre más avanzada la enfermedad, convendrá aplicar un tratamiento desparasitario con metronidazol aplicándolo sobre el tanque afectado a razón de 250mg del compuesto por cada 30 o 40 litros de agua, en función de la gravedad de la situación y de los individuos que habiten el acuario. En cualquier caso será recomendable comprobar el sistema de oxigenación del tanque durante el tratamiento. Dado que la vida útil de este compuesto no supera en ningun caso las 8 horas convendrá realizar un cambio parcial de agua equivalente a un tercio del acuario cada 24-48 horas con la correspondiente renovación de la dosis.

En casos de extrema gravedad puede aplicarse un tratamiento con el compuesto conocido como verde de malaquita, siempre en un tanque específico para estos fines, a razón de 1mg/15l.

Para finalizar, cabe destacar la importancia de no terminar el tratamiento hasta no haber eliminado por completo todo rastro de la enfermedad o de lo contrario puede reaparecer de manera más virulenta.

Punto Blanco

Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:40