MONTA


Para que la monta se realice no deben existir factores externos que puedan distraer a los animales. Es norma general presenciar la monta por parte del criador, y una vez efectuada ésta se ha de proceder a la separación de los reproductores. Existen hembras que por distintas razones no se dejan montar por el macho, como puede ser el caso de las primerizas; entonces los criadores pueden intervenir sujetando a la hembra en la posición correcta para que el macho pueda efectuar la monta, Ëste es el denominado apareamiento forzado. Una vez efectuada la monta y producida la eyaculación, el macho, se retira violentamente y cae al suelo, perdiendo el equilibrio de lado o hacia atrás despues de emitir un gemido. En la explotación industrial es suficiente tener un macho por cada 10 hembras, éste es capaz de efectuar de 2 a 3 cubriciones en media hora.
Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:40