LA PRESENTACIÓN PERSONAL

Proyectar una buena imagen no sólo es cuestión de vestuario. Nuestra imagen exterior está muy condicionada por el cuidado e higiene personales. Un ejecutivo debe conservar siempre un aspecto agradable y limpio. Esto se consigue de la siguiente manera:

· El Cabello:

Corto. Debe tener un corte clásico y discreto. No se ven bien las colas, las tinturas o los cortes irregulares. El cabello se debe mantener limpio y libre de deficiencias como caspa, resequedad o grasa excesiva.

· La Afeitada:

Debe ser diaria, de lo contrario, el ejecutivo se verá desordenado y desaseado. Si usa bigote o barba, debe hacerse un arreglo y cuidado periódicos.

· Los Dientes:

Dicen demasiado de la persona. El ejecutivo debe mantenerlos sanos y limpios. Debe procurar siempre un aliento agradable y fresco. Siempre se aconseja lavar los dientes después de cada comida y visitar al odontólogo con regularidad. 

· Las Uñas:

Deben cortarse periódicamente, mantenerlas limpias y organizadas. No es muy recomendable usar esmaltes transparentes. Es preferible obtener un brillo natural, usando implementos o productos especiales para el cuidado de las uñas. 

· Orificios y Comisuras:

Al revisar nuestro aspecto frente al espejo debemos prestar especial atención a los lagrimales, oídos, nariz y comisuras de los labios. Detalles primordiales de la imagen que proyectamos.

· Los Aromas:

Es indispensable el uso del desodorante. El aroma de la loción debe ser suave y discreto. Debe aplicarse sin exageración.


Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:39