RECOMENDACIONES GENERALES

• Dependiendo de determinados factores laborales, como el cargo, responsabili-dades, cultura organizacional y entorno en el que se mueve el ejecutivo, la pre-sentación personal y el vestuario masculinos también han ido tomando forma. Atrás se ha dejado la noción de “hombre trajeado”, el cual siempre ofrecía la misma imagen. Se ha pasado a un concepto más innovador, actual, moderno y urbano, pero, sin obviar estos cánones y “estilo clásico”.

• Elegir el cómo vestir depende, en gran medida, del tipo de empresa en la que labore el ejecutivo, el cargo que ocupa y la filosofía corporativa. También es muy importante observar el entorno en donde establece sus relaciones comerciales y de negocios; no es lo mismo ir a visitar a un jefe de compras o ejecutivo de una organización, que le recibe en su despacho, que ir a visitar a un jefe de compras de un taller mecánico, de una obra civil o de una empresa agropecuaria, que en muchas ocasiones, está con ropa informal o de trabajo; por tanto, para no sen-tirse incomodo o que desentona, observe su entorno y en dónde realiza sus ne-gocios. Haga caso del saber popular, al cual en esta ocasión se le ha hecho una pequeña adaptación y que dice: “donde fueres, viste lo que vieres”.

• El clima incide a la hora de vestir, por eso, en países, regiones o ciudades más cálidos o en verano, los colores que se suelen utilizar son los claros y, en algunas ocasiones, la indumentaria se hace un poco informal. En cualquier caso, el sentido común y la observación del entorno, le hará ir de la forma más correcta y acorde con cualquier circunstancia.

• Los trajes más elegantes y clásicos son los de colores neutros como el negro, el gris, el azul y el café, planos o con algún grabado como la raya diplomática, “Príncipe de Gales”. Estos colores no deben faltar en el armario del ejecutivo.

• El traje masculino se compone principalmente de pantalón y chaqueta. El chaleco cada vez pierde protagonismo; no obstante, su uso hace un vestir más elegante y clásico. Si se utiliza se debe llevar siempre abrochado.

• El traje se utiliza completo: chaqueta y pantalón. Estas dos prendas deben ser del mismo color, diseño y material. No se recomiendan los llamados “bocadillos”.

• Dar un toque de color a la indumentaria masculina es atrevido y divertido, pero se deben evitar los colores excesivamente llamativos. Recuerde siempre la senci-llez y discreción en el estilo.

• Los hombres muy altos o muy bajos deben evitar los trajes llamativos. Si son bajos de estatura, les convienen las chaquetas ligeramente pegadas al cuerpo. Si son corpulentos, no les lucen las chaquetas cruzadas y muy ajustadas, pero sí las solapas anchas.

• En el bolsillo exterior de la chaqueta no se debe llevar lapiceros, gafas, celulares ni billeteras.

• Los hombres que tienen los pies muy grandes no deben usar pantalones estre-chos o botas entubadas.

• Las camisas deben ser de manga larga, además, deben armonizar con el traje y la corbata. El cuello de camisa más elegante es el inglés. Se recomienda el cuello italiano para los nudos de corbata anchos.

• Mantenga camisas de varios colores en el armario. Esto le permitirá jugar y hacer combinaciones con los trajes clásicos. Las camisas blancas, de color claro o de rayas finas, combinan mejor con los vestidos tradicionales. No deben ser más oscuras que el traje, aunque la corbata sí será más oscura que la camisa. Todas las camisas que se lleven bajo la chaqueta han de ser de manga larga.

• A los hombres de cuello largo y delgado les convienen los cuellos altos por detrás. Si por el contrario, tienen cuello corto y grueso, les lucen las camisas con cuellos bajos y puntas no muy abiertas

• No lleve el cuello de la camisa abierto y procure llevar el botón abrochado.

• El nudo de la corbata debe estar bien elaborado, ajustado y centrado. Si no es así, la imagen que ofrece el ejecutivo es desequilibrada. El extremo de la corbata ha de tocar la hebilla del cinturón. El mejor tejido para una corbata es la seda y se debe cuidar que vaya bien combinada con la camisa y el traje.

• Lo ideal es tener un buen surtido de corbatas de colores planos, con figuras y de rayas. Recuerde que las corbatas con texturas se usan con camisas lisas y vice-versa.

• Las medias deben ser lisas, del color del pantalón. Los calcetines con texturas o grabados se recomiendan para el traje informal.

• En cuanto a los zapatos, los colores más adecuados son el negro, el café y el vinotinto. El estilo más convencional es el de cordones y horma estrecha. Los mocasines están permitidos, siempre que su diseño sea discreto.

• El descuido en los zapatos deja que desear del ejecutivo. La regla marca que los zapatos deben estar siempre impecables. El mejor color es el negro, para trajes oscuros, y el café para trajes claros y colores tierra.

• Si se usa cinturón, no se recomienda llevar tirantes y al revés. Nunca se usan las dos cosas a la vez.

• No es recomendable el uso excesivo de joyas o complementos: la argolla de ma-trimonio y un reloj acorde con la vestimenta, es suficiente.

• En cuanto a los pañuelos, siempre serán elegantes los de color blanco y muy bien planchados.

• Mostrar un buen aspecto facial es muy importante actualmente. En el mercado existen muchos cosméticos y tratamientos para lucir una piel tersa y sana, indi-cados para el hombre.

• Es aconsejable, en cuanto al perfume, usar una colonia o perfume fresco y dis-creto.

Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:39