Usabilidad de los objetos cotidianos

Para que comprendamos que la usabilidad no se refiere únicamente a sitios web o a programas informáticos, veamos algunos ejemplos de buena o mala usabilidad referida a objetos cotidianos. El objetivo es que, junto con el ejemplo que acabamos de ver, contribuyan a que el alumno termine de formarse una idea lo más acertada posible de en qué consiste y qué persigue la usabilidad, antes de pasar a estudiar algunas pautas concretas de diseño de sitios web usables.


Teléfonos móviles

Los teléfonos móviles cada vez están siendo más objeto de estudio en el campo de la usabilidad. O, dicho de otro modo, los fabricantes de móviles cada vez dedican más recursos a estudiar la usabilidad de los mismos (y, más concretamente, del software que éstos incorporan). Pese a ello, aún son numerosos los fallos de diseño de tales aparatos, referidos a menús confusos, necesidad de realizar bastantes pulsaciones de teclas para llevar a cabo algunas acciones comunes, etcétera.

Ejercicio
¿Cómo crees que debería ser la interfaz de tu teléfono móvil para indicar una llamada perdida?
Parece una cuestión sencilla, ¿verdad? Bien, aun así, dedica, por favor, unos minutos a pensar en ello (tal vez sería conveniente incluso que realizaras uno o varios bocetos, con lápiz y papel, no sólo de lo que debería mostrar el teléfono en la pantalla sino también pensando en cuál debería ser el comportamiento de las teclas en esa situación).

Solución
Bueno, más que solución, esto no pretende ser más que un punto de partida para el debate de las múltiples soluciones que se os puedan haber ocurrido. Más que en la solución perfecta me centraré aquí en qué es lo que no quiero que haga mi teléfono ante una llamada perdida.
Una primera opción tal vez podría ser, simplemente, que el teléfono mostrase en la pantalla un mensaje como el siguiente:


llamada

Obviemos por ahora lo concerniente a cómo responder a la llamada o prescindir de ella. Centrándonos sólo en el texto del mensaje en sí, ¿hay algún problema con él? ¿Se te ocurriría alguna forma de mejorarlo?

Vamos a dar una pista más: ¿y si dicho número fuera el de una persona que tenemos en la agenda? Porque si el número es de nuestra pareja, por ejemplo, tal vez no haya nada malo en que ése sea el mensaje (al fin y al cabo, normalmente nos lo sabremos de memoria y nos está aportando toda la información que necesitamos: saber quién nos llamó). Ahora bien, si es el número de un colega, o de un amigo con el que hablamos de cuando en
cuando. Es muy probable que no lo reconozcamos a la vista del mensaje. ¿Qué tal si, en ese caso, el teléfono mostrase un mensaje como el siguiente?

ll

Mejor así, ¿no? Entonces, ¿por qué muchos modelos de teléfonos móviles siguen empeñándose en mostrar solamente el número del teléfono que efectuó la llamada? Se da la paradoja de que, en algunos de eso modelos que sólo nos muestran el número, aunque tengamos a ese contacto guardado en nuestra agenda, si pulsamos la tecla correspondiente a llamar, entonces sí que nos aparece en la pantalla algo así como:

lll

No parece que haya, pues, algún tipo de imposibilidad técnica para mostrar el nombre inicialmente. ¿Por qué no poner, entonces, el nombre de la persona que llamó ya en el mensaje inicial?

Es de suponer que todos estaremos de acuerdo en cuál sería la mejor solución en lo que respecta al mensaje mostrado –y que es el principal fallo de usabilidad que quería ilustrar en este ejemplo–. Ahora, podríamos entrar a analizar cuál sería la mejor manera de que el móvil nos permitiese responder a esa llamada, consultar a qué hora fue efectuada, etcétera. No vamos a entrar en detalle a hacer un estudio de las posibles alternativas. Pero seguramente todos habréis pensado en que el teléfono permita marcar de un modo lo más
directo posible el número correspondiente. Es decir, de poco valdría, desde el punto de vista de la usabilidad, que apareciese inicialmente el mensaje “Tiene una llamada perdida de Juan” si luego nos obliga a ir a consultar la agenda y buscar allí “Juan” para poder devolver la llamada.

Hoy día, casi todos los modelos incorporan una especie de menús contextuales, que en función de la información mostrada en pantalla, o del menú en que nos encontremos, permiten efectuar directamente una operación u otra. En el caso de las llamadas perdidas, por ejemplo, parece bastante razonable que pulsando la tecla principal del teléfono podamos llamar a ese número.
Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:39