LA TEJEDURIA

La tejeduría es una de las actividades artesanas más antiguas que se conocen. Ya en tiempos remotos existían en los países mediterráneos especialistas dedicados a la tejeduría en plan comercial, Cuando aparecieron los telares automáticos, la tejeduría se transformó en industria, lo que supuso la pérdida casi total de los conocimientos populares de técnicas que hasta entonces se habían ido desarrollando y transmitiendo de generación en generación. ¿Cómo se puede explicar entonces el renacimiento de la tejeduría manual? Varios pueden ser los motivos. Quizá se pueda citar, en primer lugar, la necesidad que la persona siente de crear algo Por otra parte, existe también un mercado que solicita productos únicos caracterizados por la no identificación comercial, productos con un sello personal e irrepetible que sólo el trabajo artesano puede ofrecer. Sabemos, además que la tejeduría manual, por múltiples razones, ocupa hoy un lugar de importancia en la educación e incluso en aplicaciones terapéuticas. Es más, la tejeduría manual tan atrayente como hobby en la actualidad se está reafirmando nuevamente como profesión.

La persona que se inicia en la tejeduría manual tiende sentirse extraña ante el telar, indecisa por la cantidad de pasos previos que requiere el proceso o confusa por la profusión de términos totalmente nuevos para ella. Es perfectamente comprensible, son necesarios un esfuerzo y una dedicación pero es seguro que si se persiste en ello se recogerán los frutos.

En la enseñanza de la tejeduría es necesaria la debida atención al telar como instrumento que nos permitirá la realización del tejido.


Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:39