EL CARTEO

El carteo, o juego de la carta, empieza después de la finalización del canto, cuando el contrato ha sido definido.
El carteador, también llamado "declarante", será aquel que, para su bando, haya mencionado, durante el canto, por primera vez la denominación del contrato final. Por ejemplo, si el contrato final es de cuatro espadas para la pareja norte-sur, el declarante será aquel jugador (norte o sur) que haya mencionado primero las espadas durante el canto.

La Salida : el jugador sentado a la izquierda del carteador "sale", es decir que es el primero en jugar. Escoge libremente una carta de su mano y la pone cara arriba sobre la mesa.

El compañero del carteador, llamado "EL MUERTO", coloca su mano entera sobre la mesa, cara arriba, a la vista de todos, arreglando sus cartas en 4 columnas, una por palo, empezando por el palo de triunfo. Alterna los colores y, dentro de cada palo, ordena las cartas de la más alta a la mas baja y orientadas hacia el carteador.

El carteador estudia la situación, decide el plan de carteo a seguir, selecciona una carta del muerto en palo pedido por la carta de salida y la juega.
El compañero del jugador que salió juega a su vez. El declarante juega de su propia mano.

El jugador que gana la baza es el primero en jugar la baza siguiente. Si la carta ganadora fue jugada del muerto, el declarante deberá jugar una carta del muerto para iniciar la siguiente baza.

El declarante tratará de cumplir su contrato. Los oponentes, llamados ahora "la defensa", tratarán de ganar el suficiente número de bazas para impedirlo y "hacer caer" (multar) al declarante.

La mano del muerto está a la vista de los otros tres jugadores, quienes deben tomar en cuenta su forma de jugar.

Cuando las 13 bazas han sido jugadas, se determina la puntuación obtenida, se mezclan las cartas y se reparte la siguiente mano.

Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:39