8. No hables demasiado. Esta bien hablarle de ti misma, de tu vida, de tus aficiones y gustos. Pero que no sea un monólogo. Deja que él te hable de sí mismo, y muéstrate interesada en todo momento. Escúchale con atención, que vea que te importa lo que te cuenta. Tiene que sentirse especial, único. Pero ojo, eso no significa que te pases todo el rato callada. Habla, y muéstrale que eres capaz de tener conversaciones muy interesantes y variadas.
Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:40