La ciudad de Concepción se fundó originalmente en el actual emplazamiento de Penco por Pedro de Valdivia el 5 de octubre de 1550, frente a la Bahía de Concepción. Dos años después, el asentamiento fue reconocido como ciudad a través de una real cédula que le otorgaba un escudo de armas, vigente en la actualidad. El hecho que Penco haya sido la cuna de la ciudad, derivó en que los los habitantes de Concepción posean como adjetivo gentilicio el de "penquistas" y todo lo relativo al Gran Concepción sea llamado "pencopolitano".
Durante el desarrollo de la Guerra de Arauco, Concepción se transformó en el núcleo militar de este enfrentamiento, al estar ubicada en la frontera española-mapuche. La ciudad era constantemente despoblada y repoblada, y sufría asedios y ataques militares.
En los siglos XVI y XVII fue atacada por piratas ingleses y holandeses como Oliver Van Noort.
Durante la mayor parte del siglo XVI, Concepción fue el asiento de la Real Audiencia, el principal tribunal de justicia de la Corona española en el Reino de Chile.
Tras el terremoto de Concepción de 1751, que destruyó la ciudad, se decidió la reconstrucción del poblado en el denominado Valle de la Mocha, ubicación que mantiene actualmente. El traslado fue aplazado 12 años, por la oposición un grupo influyente de vecinos, encabezados por el Obispo José de Toro y Zambrano Romo. La muerte del Obispo, y el hecho que su reemplazante estuviese de acuerdo con el traslado, facilitaron su realización.5 6
Mientras Concepción se traslada a su actual ubicación, fue prohibida la ocupación territorial de Penco, por una disposición de la administración colonial, hasta que en 1842 la zona volvió a poblarse, y en ese mismo año el Estado derogó la prohibición de su poblamiento, denominándola Villa Penco, dependiente de la municipalidad de Concepción hasta que en 1898 Penco fue declarada ciudad.
El crecimiento de Concepción ha sido especialmente rápido a partir de la segunda mitad del siglo XX, llegando a fusionarse con otras localidades de la región.
Desde su fundación, la ciudad ha sido una de las tres más grandes de Chile, teniendo un importante papel en el desarrollo económico, administrativo y militar del país.7 Los puertos de Talcahuano, Tomé, San Vicente y Lirquén, que están próximos a la ciudad, la hacen un centro de exportaciones y, antiguamente, un lugar de llegada de numerosos inmigrantes cuando las costas chilenas eran ruta obligada para los barcos que venían desde Europa.
En el siglo XX Concepción se transformó en una cuna de ideales políticos y culturales, en gran parte gracias a la fundación, en 1919, de la Universidad de Concepción, que ha sido una de las universidades tradicionales más importantes de Chile y donde a menudo tenían su base importantes protagonistas del quehacer cultural chileno, como el poeta Gonzalo Rojas, quien organizaba encuentros de escritores de toda América Latina.
En abril de 1987 el Papa Juan Pablo II, en el marco de su visita a Chile, estuvo en Concepción durante dos días.
En 1996 la comuna de Concepción es dividida, creándose Chiguayante y San Pedro de la Paz, que se han convertido en ciudades dormitorio de Concepción.
A fines del siglo XX y principios del siglo XXI Concepción sufrió una gran transformación en su imagen urbana, la cual se focalizó en lugares históricos de la ciudad como la Plaza de la Independencia y en la construcción de otros como el nuevo Barrio Cívico de Concepción. Estos cambios se han realizado bajo la tutela de varios proyectos, como Biovías y el Proyecto Bicentenario.
Concepción, cuyo lema comunal y eslogan es "La Capital del Sur de Chile", actualmente es una ciudad moderna, que avanza rápidamente en población e infraestructura. Esto se debe básicamente a la gran explosión demográfica, cultural e inmobiliaria que ha experimentado, y que la mantiene como una de las ciudades más importantes de Chile.
El 27 de febrero de 2010 se produjo un terremoto de magnitud 8,8 en las escala Ritcher, con epicentro a 90 kilómetros al noroeste de la ciudad, causando numerosos daños materiales y un total de 524 muertos. Sin embargo, las consecuencias del terremoto fueron casi tan devastadoras como el sismo 8.8, en lo que se conoce como el terremoto social. Esto, debido a que horas después del gran sismo, se registraron numerosos saqueos y robos a supermercados, grandes tiendas, casas y todo tipo de almacenes, donde se registraron hurtos de víveres e increíblemente, de televisores, lavadoras y diversos artículos electrónicos.
Última modificación: jueves, 7 de junio de 2018, 07:40